APRECIO

Estas palabras te las dedico a vos V.O.E porque cuando vi las lágrimas de emoción en tus ojos al  escuchar lo que yo estaba contando en ese momento, aprecié, en todo el sentido de la palabra aprecio ( no solo en darme cuenta sino tambien en valorarlo) tu sensibilidad.
No te lo dije en ningún momento, pero me quedó esa imagen tuya , de lo sensible que sos ante las historias y los sentimientos de los demás.
Eso te describe como persona y yo he decidido estar cerca de esas personas que empatizan y saben ubicarse en los zapatos de otros para comprender porque dicen lo que dicen, hacen lo que hacen y sienten como sienten.
Estas palabras son para vos amiga Sanjuanina. Abrazo enorme!!
Quiero que sepan todas Uds. a quienes solo voy a identificar por sus iniciales que han sido compañeras sumamente especiales en todos esos momentos de charlas , posts, opiniones, comentarios y muy generosas en compartir sus propias historias de vida conmigo. De todas y cada una de uds. he aprendido algo, he aprendido mucho.
A casi todas he tenido la fortuna de conocerlas personalmente y otras estoy en camino, como verán adoro recorrer recorrer caminos, y mas aún cuando me conducen a personas que como yo han transitado o están transitando por las mismo, adoro estar entre pares y a todas uds. yo las siento como mis pares, cada una desde su lugar y su historia, historias que en algún punto siempre se encuentran y coinciden.
A uds. MO, LJ,AIB,LR, MVL,FM y VOE, espero no haberme olvidado de nadie, no se pongan celosas las aprecio muchisimo , por eso estas palabras.- ;)
Y desde aquí continúo con lo que venia contando sobre mis comienzos en el camino de llegar a tener a mis hijos, yo era muy joven, todo esto me pasó entre los 26 y los 30 años de edad. Edad en la que la mayoría de las mujeres buscan y desean tener hijos. Todo el mundo que me rodeaba por ese entonces (compañeras de trabajo ,amigas, vecinas ) se embarazaban sin problemas, todo el mundo tenía a sus hijos al final del embarazo, todo el mundo se convertía en madre, menos yo.
Ese era mi estado de situación, allí yo estaba inmersa en esa época, mi sufrimiento era enorme, tener que sobreponerme ante tanta pérdida personal, en el medio de tanta alegría externa.
Siempre me sentí sola, y muy, muy triste, toqué fondo el día que perdí, hasta ese entonces, mi último embarazo y sentí que por ese camino de la maternidad biológica yo no podía seguir mas, no deseaba seguir mas, para mi la maternidad biológica representaba hasta ese momento pérdida y sufrimiento , y yo no deseaba seguir asi.
Gracias a Dios, al destino y al amor que mi esposo sentía por el mi, yo por el y por el deseo de ambos de tener un hijo, abrazamos juntos la decisión de iniciar el camino de ser padres a traves de la adopción.
En esos años de estar solitos los dos, viajamos muchisimo, compartimos muchisimo, lloramos muchisimo, reímos muchisimo, siempre juntos.
Nuestro deseo para la navidad de cada año era siempre el mismo, tener un hijo, y asi teníamos por costumbre escribir tarjetas de navidad y colocarlas en el árbol con nuestro deseo escrito en ellas.
En marzo de 1997 tuvimos nuestra primer audiencia en el juzgado que nos correspondía por domicilio para iniciar los trámites de inscripción en el registro, para obtener la guarda con fines adoptivos de una criatura a la que pudieramos sostener en nuestros brazos y llamar hijo.
Llegamos hasta el despacho de la secretaria del juzgado deseando y diciendo que queríamos tener un hijo, que no necesitabamos que tuviera nuestros genes, necesitabamos poder tenerlo en brazos, besarlo, llevarlo a casa, convertirlo en nuestro hijo y escucharlo decirnos mamá y papá, nada mas.
Salimos de allí luego de varias audiencias y trámites con asistente social, medico, psicóloga, con esta certeza y estas palabras dichas por la Licenciada " no sabemos cuando va a ser, pero esta vez ya están embarazados de papeles y en cualquier momento, sin precisar tiempo, van a ser padres, van a tener un hijo ". y añadió vayan preparando "cosas" para su hijo, cosas que le demuestren luego a ese hijo como fué esperado, sin usar colores que determinen sexo, talles, etc porque no sabemos que será ni como será.
Lo primero que le compré a mi futuro hijo fué un toallón con capucha, de color blanco con vivos amarillos y que tenia  tres ositos en la capucha de color en rosa, celeste y verde ,( toallón que aún  conservo).
Aqui realmente comenzó todo y fué una de las etapas mas maravillosas de mi vida, de nuestra vida.
La espera se hizo larga, la ansiedad fué enorme, nos apoyamos mucho, muchisimo en la Fé, cada 31 de agosto de esos años fuimos a San Ramón Nonato a pedirle por nuestro hijo, ese 31/8/1998 , mientras mi esposo y yo recibíamos la bendición para ser padres adoptivos, sin nosotros si quiera sospecharlo nacía MARIA FLORENCIA nuestra bebé, nuestra primer hija, solo que nosotros lo supimos casi 6 meses después, primer milagro de mi vida, quien quiera oir que oiga.
Y aqui me detengo, solo para decirles nuevamente que al convertirme en madre, jamás en mi vida volví a sentirme sola, jamás, y no solo por la compañía de mi hija que ocupó toda nuestra vida, sino porque tenerla me devolvió la felicidad, nos devolvió la felicidad, las ganas de conectarnos con la vida, con la gente, de aceptar la vida como nos fué otorgada, de disfrutarla y de rodearnos de personas que compartieran los mismos valores que nosotros. Fué asi tal cual, Maria Florencia, nos unió y nos enseñó mas que cualquier otra persona en el mundo hasta ese momento.
Pero aún nos faltaba aprender más. Después sigo.-